(reseña breve porque estoy muerto de sueño y mañana, no, *hoy* tengo bastante trabajo. )
El sábado pasado fui un ratito a la milonga de la Casa del Tango.
Me duele en el alma decir esto pero la música no me gustó para nada; para escuchar estaba mas que bien, pero no me movía ni una fibra para impulsarme a bailar. Lo único bueno de esa noche fue que volví a ver a Liliana después de mucho tiempo.
Ese mismo sábado se festejaron los 10 años del Centro Cultural Estación Provincial. Fue una fiesta espectacular; no pude estar a la tarde porque tenía otras obligaciones pero Marcos sacó unas fotos divinas y las subió a su flickr acá.
Llegué luego de la milonga (2 y media ~ 3 de la mañana), estaba repleto de gente y autos, llenos los bares y el restaurant también. Subo por la escalera, se oye una cosa mezcla de tarantella y ska. En la sala 5 había una muestra algo rara, luces rojas y lo que parecían ser bolsas de sangre. También estaba Martin Feely, no me reconoció pero me saludó de compromiso. Fermín parecía bastante apurado por resolver algo. Mucha gente, algunes en las mesas hablando y riendo, otres en la barra y un grupo muy alegre bailando mas al fondo.
El ambiente estaba espectacular, lamento muchísimo no haber salido con la cámara.