Esta pluma perteneció a mi abuelo. Aún no tuve tiempo de probarla porque la tinta está medio cara (soy algo exquisito en ese sentido, pero no puedo gastar $70 por un frasquito de Montblanc)
Esta otra es una “Massag Resisto”, proveniente de Checoslovaquia. Por mucho tiempo busqué una similar y de casualidad encontré varias en una librería de La Plata. A pesar de su aspecto y edad es impresionantemente agradable escribir y dibujar con ella.